Cambalache: diseño con impacto positivo

 Cambalache: diseño con impacto positivo

Todos tenemos la capacidad de generar cambios en el mundo. Es cuestión de identificar algo que no funcione y pensar cómo podemos aportar a que se resuelva. Realmente, es así de sencillo. Alumnos de la Universidad Casa Grande lo están demostrando por quinto año consecutivo con su Proyecto Cambalache. Se trata de una feria en la que se intercambian bienes por objetos diseñados por los alumnos. Esta es una iniciativa que nos inspira a tomar acciones, desde nuestras trincheras, para generar un impacto positivo.

Conversamos con Pamela Villavicencio R., Coordinadora de la Carrera de Diseño Gráfico y Comunicación Visual de la Universidad Casa Grande, sobre el Proyecto Cambalache y cómo podemos, como marketers y creativos, lograr lo mismo.

¿Cómo nace la iniciativa detrás de Cambalache?

En el 2013 nace una iniciativa de los estudiantes de 4to. año de la carrera de Diseño de desarrollar una biblioteca popular en la asignatura de Gestión de Proyectos de Diseño. La propuesta es aceptada para ser desarrollada en la instancia pedagógica de Casos Prácticos de Diseño. Allí se incluyó la creación de una tienda de diseño con artículos diseñados y desarrollados por los estudiantes para ser intercambiados por los libros. Desde ese piloto el proyecto fue creciendo, mejorando e implementando gestiones que hacen que cada año sea un desafío para los grupos de estudiantes involucrados. Este proyecto se realiza por estudiantes de cuarto año, como gestores de las diferentes comisiones, y de primer año, como equipo de la tienda de diseño.

que es cambalache

¿Cuáles fueron las expectativas iniciales y cómo ha evolucionado el proyecto con los años?

Para nosotros es importante diseñar espacios pedagógicos que permitan a los estudiantes desarrollar destrezas que realmente utilizarán en su profesión. En este caso, era el diseño. Las expectativas iniciales giraron en torno a que los estudiantes de cuarto año fueran capaces de gestionar por completo un proyecto con objetivos, estrategias e informes de resultados.

Cambalache permite que el estudiante de diseño gane compresiones relacionadas a la gestión de recursos humanos, materiales, económicos, y vincule su gestión a lo social. Además, logra demostrar que el diseño es transversal. Es decir, se puede lograr una vinculación no solamente trabajando como diseñador en una organización sino también junto a iniciativas que intervienen con grupos vulnerables, haciéndolo sostenible.

Nuestros resultados en estos 4 años han sido:

resultados cambalache

resultados finanzas cambalache

¿Cuáles han sido los principales desafíos que han tenido que superar?

El proyecto Cambalache tiene 5 comisiones que sistemáticamente logran un objetivo común relacionado a lo social. Cada comisión tiene sus metas e indicadores de éxito. El desafío detrás del proyecto es sacar a los estudiantes de su zona de confort y enfrentarlos a desempeñarse en áreas necesarias para el funcionamiento de la tienda de diseño, que es el medio por el cual se obtienen los recursos para la organización que ese año tenemos como beneficiaria.

Financiar el proyecto, mantener motivado un equipo de 40 estudiantes (que por 3 semanas sin descanso trabajan para crear productos interesantes para que la comunidad los intercambie por el recurso meta), convocar a la comunidad, desarrollar y explicar el sistema de trueque de ese año, etc.

 

Con la experiencia de Cambalache, ¿cómo percibes el deseo de las personas de participar en iniciativas de bien social o medioambiental que buscan mejorar el mundo de alguna manera?

El deseo existe, está latente. Lograr que ese deseo se vuelva un hecho y que sea sostenible en el tiempo, es el desafío principal. En la UCG, con el proyecto Cambalache, cada año podemos palpar el deseo de los jóvenes de involucrarse en algo por el bien social por medio de sus habilidades profesionales, y el de la comunidad, al menos la que ha respondido a nuestras convocatorias, de ser parte activa de esta iniciativa. La sostenibilidad es algo que se debe trabajar al detalle. Hay muchos chispazos de actos de buena voluntad, pero mantenerlos es difícil. Estar en Casa Grande es lo que nos ha permitido sostener el proyecto porque es donde hay la apertura para aprender y emprender, y sobre todo vincularnos.

¿Qué oportunidades hay actualmente para las marcas y los creativos detrás de ellas de generar impactos positivos en la sociedad?

Hay oportunidades hasta donde el cielo tenga límite. Lo que hay que tener es sensibilidad de identificar las necesidades del otro. Luego podemos articular las destrezas personales y colectivas , rompiendo las barreras de lo propio en busca de lo colectivo. Así lograremos vincularnos inteligentemente y potenciar los esfuerzos para conseguir un mayor impacto positivo. Esta no es una época para crecer como llaneros solitaries. Es un tiempo de vincularnos desde la diversidad de áreas, marcas, productos, destrezas.

Solo hay que tener los ojos bien abiertos para identificar esos socios estratégicos y juntos lograr un impacto social positivo.

Esta iniciativa demuestra de una manera increíble el poder de la colaboración. ¡Todos podemos hacer algo para mejorar el mundo! Solo tenemos que ver cómo podemos hacerlo con las habilidades que ya tenemos.

¡Los invitamos a visitar Cambalache el 23 de septiembre, desde las 09:00, en la Universidad Casa Grande!

Pesantes Denise

Notas relacionadas

Leave a Reply