Rompiendo fronteras: un líder apasionado por la gente

Yoda, el maestro Jedi en la Guerra de las Galaxias, es quien ayuda a Luke a conectarse con “la fuerza” que él ya lleva dentro. Él lo único que hace es entrenarlo y ayudarlo a creer que puede ser mejor.

Con este personaje se identifica Pedro Villamar, por su pasión por sacar lo mejor de las personas. Luego de 30 años como Gerente General en Corporación GPF, empresa que maneja las cadenas Fybeca, Sana Sana, Oki Doki, entre otras, lo dejó todo para emprender nuevos retos.

“Si tú me preguntas qué es lo que más extraño de GPF es la gente. Es poder ayudar a transformarlos, a inspirarlos, a motivarlos. A mí me gusta retar a la gente a que sueñe y crea que está cambiando el mundo”.

Desde que Pedro dejó GPF hace cuatro años, se encuentra emprendiendo desarrollos tecnológicos en Silicon Valley. ¿Por qué? Pues, porque su pasión por la gente (y por la innovación) lo llevó a buscar formas de lograr que la tecnología esté al servicio del ser humano, para que este sea mejor.

Sin embargo, a pesar de encontrarse en Silicon Valley, aprendiendo nuevas tecnologías y rodeándose de grandes innovadores de todo el mundo, su nueva start up la creó en Ecuador, con equipo ecuatoriano.

Pedro Villamar cuenta que durante la etapa prueba-error de su start up, descubrieron que la aplicación que estaban desarrollando era muy compleja. Tuvieron que empezar de cero, pero con mucho optimismo. Él nos asegura que “cree que tratar y fallar es un aprendizaje. Nos obliga a ser más innovadores y es algo que las compañías tienen que aprender a hacer. Ser innovador es cuestión de supervivencia.”

Hacer carrera fuera del Ecuador te forma, te da nuevas experiencias y te saca de tu zona de confort. Pero también lo hace iniciar un emprendimiento en una bodega y con tan solo una mesa plástica, como lo hizo Pedro. Él asegura que “volver back to basics te permite apreciar a la gente que tienes y lo que estás viviendo. Todavía no puedo decir que tengo éxito en este nueva aventura, pero se me está abriendo el mundo y la mente”.

Y es que más que emprender un negocio, Pedro Villamar se propuso emprender una aventura. “Yo pienso que la innovación y el emprendimiento están en nuestro ADN. No importa la edad que tengas, sino la decisión de lograrlo”.