Un original empaque que permite proyectar un holograma
En japonés, el nombre de la famosa marca de chocolates KitKat suena parecido a ‘kitto katsu’, que significa “seguramente triunfarás».
La fonética del nombre de la marca, que es fácilmente asociada con una frase de positivismo, ha creado un simbolismo alrededor del popular chocolate, creando una especie de tradición y rito alrededor de él. Así, el KitKat es entregado entre los jóvenes japoneses como una manera de desearse buena suerte; sobre todo a los estudiantes que se preparan para las pruebas de ingresos a las universidades.
Con ese contexto en cuenta, KitKat ha lanzado una creativa propuesta que consiste en 500 barras doradas (cubiertas con oro y de venta exclusiva en ocho boutiques), con un empaque novedoso. El packaging de estas barras permite a quienes reciben la golosina, proyectar una especie de holograma.
Este KitKat especial incluye una lámina transparente armable con la que se forma una mini estructura como pirámide que, colocada sobre el smartphone, proyecta imágenes de videos de la banda japonesa Dish. El conjunto musical es muy popular entre los jóvenes del país nipón.
Esta edición limitada de KitKat se venderá en las oficinas postales de Japón hasta finales de marzo, mes en el que culmina la temporada de exámenes en Japón.